La denuncia de la Organización Salvemos al Iberá fue levantada por el programa televisivo CQC poniendo en evidencia a nivel nacional la depredación de los recursos naturales incluso por aquellos funcionarios que se supone están para defender los intereses públicos.Los funcionarios responsables en los distintos estamentos gubernamentales no aparecieron ante cámara y la misma Josefina se escabulló de su despacho.
Ver informe de los denunciantes del caso JOSEFINA MEABE DE MATHO
Millones de litros serán robados en los próximos meses mediante 11 bombas instaladas en sus lagunas y ríos. El Estado conoce la situación y no hace nada.
Mario Rujana, el responsable del ICAA (Instituto Argentino del Agua y el Ambientes) es complice de la situación, encubriéndolos.Ayudanos a detenerlo.
Envianos un email a coordinador@salvemosalibera.org para detener este crimen ambiental!!!
El Parque y Reserva Ibera, es el humedal subtropical de mayor importancia de Argentina. Fue creado en 1983 y recategorizado hace meses por su importancia para la proteccion de la biodiversidad. Hoy esta en serio peligro por la construcción de canales y el robo ilegal de sus agua.
Once canales han sido construidos dentro del Parque, colocando bombas para chupar el agua y trasladarla hacia campos privados vecinos, donde regarán 5000 hectáreas plantadas con arroz.
En Iberá hay más de 2000 productores del campo que quieren hacer las cosas bien, pero 11 desprestigian al sector.
Estas obras fueron realizadas ilegalmente por empresarios, bajo la mirada impávida del Estado. El Ingeniero Rujana, director del ICAA, ha sido cómplice directo de varios de estas obras y en otros casos ha dejado que actúen sin detenerlos.
100.000 millones de metros cúbicos serán bombeados la próxima temporada arrocera (3 meses), lo que equivale al consumo humano de agua en toda la provincia de Corrientes durante 1 año.
El Iberá es un humedal de alta biodiversidad. La fauna de corrientes encuentra allí su último refugio. La producción ecoturística, hoy en crecimiento, necesita de la fauna al igual que todos. El humedal necesita de todo su agua para funcionar correctamente. Asi como nadie osaría represar las cataratas del Iguazu para su propio beneficio, ni acopiar hielo del Glaciar Perito Moreno, nadie debería poder llevarse el agua de los esteros del Ibera.
El cumplimiento de las leyes ambientales es imperioso para poder conservar nuestro medio ambiente. El dominio público, son aquellos bienes que nos pertenecen a todos y que tienen un fin social para los habitantes de una provincia y un país. El agua del Ibera, y el Parque Ibera son de dominio público. Tenemos la obligación de cuidarlos y evitar que nos roben lo que es de todos nosotros.
Once canales han sido construidos dentro del Parque, colocando bombas para chupar el agua y trasladarla hacia campos privados vecinos, donde regarán 5000 hectáreas plantadas con arroz.
En Iberá hay más de 2000 productores del campo que quieren hacer las cosas bien, pero 11 desprestigian al sector.
Estas obras fueron realizadas ilegalmente por empresarios, bajo la mirada impávida del Estado. El Ingeniero Rujana, director del ICAA, ha sido cómplice directo de varios de estas obras y en otros casos ha dejado que actúen sin detenerlos.
100.000 millones de metros cúbicos serán bombeados la próxima temporada arrocera (3 meses), lo que equivale al consumo humano de agua en toda la provincia de Corrientes durante 1 año.
El Iberá es un humedal de alta biodiversidad. La fauna de corrientes encuentra allí su último refugio. La producción ecoturística, hoy en crecimiento, necesita de la fauna al igual que todos. El humedal necesita de todo su agua para funcionar correctamente. Asi como nadie osaría represar las cataratas del Iguazu para su propio beneficio, ni acopiar hielo del Glaciar Perito Moreno, nadie debería poder llevarse el agua de los esteros del Ibera.
El cumplimiento de las leyes ambientales es imperioso para poder conservar nuestro medio ambiente. El dominio público, son aquellos bienes que nos pertenecen a todos y que tienen un fin social para los habitantes de una provincia y un país. El agua del Ibera, y el Parque Ibera son de dominio público. Tenemos la obligación de cuidarlos y evitar que nos roben lo que es de todos nosotros.
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